Hace mucho tiempo, en el encantador corazón del centro comercial L'illa, en la vibrante ciudad de Barcelona, existía un mundo sumergido en un mar de azúcar.

Dentro de este rincón mágico de L'illa, una vieja marca de dulces, adorada por todos pero cuya imagen había perdido su brillo, decidió emprender una aventura Insayn! Su aspecto antiguo y monótono necesitaba con urgencia una transformación completa. Fue entonces cuando, como si de una varita mágica se tratara, la creatividad, las formas y los colores se unieron para dar vida a una nueva imagen.

Insayn se adentró en un mundo de golosinas y sabores, donde las chucherías hablaban con una voz suave y las piruletas actuaban como guías en este recorrido mágico. Su objetivo no era solo encantar a los niños, sino hacer que los corazones de jóvenes y adultos latieran de emoción.

Este concepto mágico nació de la necesidad de convertir este espacio en un lugar lúdico y lleno de movimiento, como si estuvieras inmerso en una feria repleta de diversión, juegos y, por supuesto, caramelos.

Formas caprichosas, colores vivos y una geometría juguetona se convirtieron en los ingredientes secretos que dieron vida a este lugar. No era solo un rincón para jóvenes aventureros, ¡sino un espacio para personas de todas las edades! Porque, como bien sabían, los dulces y la diversión no conocen fronteras de edad cuando se trata de los amantes de Que.Bo!

Entonces, si alguna vez te aventuras por L'illa en Barcelona y sientes que tus sueños de dulces y diversión necesitan un lugar para florecer, ¡no busques más! Este proyecto de interiorismo es la puerta de entrada a un mundo donde los dulces no son simplemente para saborear, sino para vivir una experiencia verdaderamente 

mágica. Únete a nosotros en este cuento moderno y descubre un mundo lleno de sabores y encanto que te dejará con un dulce recuerdo que perdurará para siempre.